El yacimiento de La Pancha 1 se encuentra a unos 50 metros al oeste de la torre derecha y se extiende por todo el área cercana a ella. Comprende una fase de ocupación fenicia como consecuencia seguramente de la expansión industrial de Morro de Mezquitilla a finales del siglo VII a.C. Una de las actividades principales de este centro fue sin duda la producción de cerámicas.
Tras un periodo de abandono, el enclave se vuelve a urbanizar en época alto-imperial siendo sus principales económicas, la agricultura y la pesca, destacando como un centro manufacturero de los productos de la mar.
Las primeras noticias de este yacimiento se remontan a 1990 con motivo de unas prospecciones arqueológicas superficiales de urgencia llevadas a cabo en el término municipal de Algarrobo, donde se recuperaron multitud de restos cerámicos pertenecientes a época fenicio-púnica y al alto imperio romano.
No es hasta septiembre de 2003 cuando por motivos de unas obras de cimentación aparecen restos de muros e infinidad de fragmentos cerámicos, en su mayoría fenicios.
Tras la detención de las obras, meses después comenzaron los sondeos arqueológicos en el solar afectado del que solo se pudo excavar algo menos de una cuarta parte de los 3000 metros cuadrados que ocupaba la parcela. El resto había sido destruido tras los removimientos efectuados por las excavadoras.
Tras la campaña de sondeos que ocupó cuatro meses se dejó al descubierto varias estructuras pertenecientes a distintos niveles de ocupación y una cantidad importante de material cerámico.
El yacimiento de La Pancha 1 comprende 4 fases constructivas:
La primera y más antigua corresponde con restos de muros y pavimentos de guijarros muy deteriorados relacionados con estancias o habitaciones que datan de finales del siglo VII y principios del VI a.C. Asociadas a ellas se documentan platos de barniz rojo, lucernas y restos de ánforas tipo Trayamar 1 (T-1)
La fase constructiva II, vinculada al siglo VI a.C., consta de muros pertenecientes a estancias y un almacén, dotados de un finísimo pavimento de guijarros del río y lascas planas de pizarra. En dicho almacén se documentó un importante elenco de ánforas T-1 que quedaron in situ tras un derrumbe. Al sur existió un vertedero de piezas cerámicas, muchas de ellas con defecto de cocción, lo cual indica la presencia de un alfar en las inmediaciones.
La fase constructiva III coincide con el último periodo de asentamiento fenicio en la Pancha 1, finales del S. VI a.C. y corresponde con escasos restos de muros muy deteriorados a causa de la ocupación de la fase posterior.
La fase constructiva IV se inicia tras un largo abandono del lugar de casi cinco siglos, ya en época del alto imperio romano (Siglos I-II d.C.). A ella se le asigna un gran muro de mampuestos que sirvió de lindero al sur, una fosa con restos cerámicos y de cenizas; y restos de cimentaciones muy deterioradas por las acciones agrícolas posteriores. Asociada a esta fase cabe destacar la presencia de Terras Sigillatas Hispánicas, un gran dolia romano, restos de ánforas salsarias tipo Dressell y restos de anzuelos y pesas de plomo para redes.
En la actualidad, el yacimiento de La Pancha 1 se encuentra enterrado y protegido bajo un edificio próximo a la torre derecha, por lo que no se puede visitar.
1 comentario:
Me ha gustado mucho este post, aporta más información sobre los yacimientos del municipio. Por curiosidad he mirado un libro sobre la historia del municipio y sólo menciona el yacimiento. Gracias por tu o vuestra labor, nuestro patrimonio no solo se reduce a la tumba del ceregumil, el morro y las torres. Un saludo.
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